A principios de los años setenta del siglo pasado tenía lugar el hallazgo de la estela funeraria ibérica  de Altea la Vella. El descubrimiento de esta necrópolis hacía suponer la existencia de un hábitat asociado, probablemente, bajo el actual núcleo urbano de Altea la Vella.

Entre 2021 y 2022, el seguimiento arqueológico de las obras de renovación de la red de saneamiento del núcleo histórico de Altea la Vella ha permitido la documentación de evidencias arqueológicas que suponen la constatación definitiva del poblamiento de este promontorio en época ibérica.

La presente comunicación ha presentado los resultados preliminares de esta actuación arqueológica y su contextualización con las evidencias conocidas hasta el momento.